Recorte de prensa sobre Pedro Pego Tomé, el último sacristán de Cilleros.
Este obra está bajo una licencia de Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 3.0 España.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Este obra está bajo una licencia de Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 3.0 España.
9 comentarios:
Yo, allá por 1960, asistí a una escuela "no oficial" con un maestro que llamaban "el Pego". Me parece recordar que se llamaba D.Eulalio. Era muy sordo y eso hacía que le hablásemos a gritos. Usábamos pizarra y pizarrín a lo largo de una larga mesa en la que a ambos lados nos sentábamos los niños. Supongo que sería familia del sacristán. Sería bueno rendirle un homenaje a aquel maestro que a tantos niños nos enseñó las 4 reglas, aunque solo fuera recordando aquí lo que de él conociéramos. Hoy habrá mucha gente en el pueblo, en torno o cerca de los 70 años que le recuerden. Yo lo hago con cariño.
Yo me acuerdo de ése señor cuándo tocaba la tronpetilla por las calles y pregonaba
Efectivamente el maestro se llamaba Eulalio Pego Tome y el que tocaba la trompetilla su hermano Pedro Pego Tome mi pedre
Yo recuerdo a los dos hermanos con mucho cariño, pues dejaron en el pueblo, cada uno en su función, recuerdos imborrables, especialmente para los que los tratamos de alguna forma.
Yo también lo recuerdo con mucho cariño.I vamos en verano a lo que llamábamos "el paso".Siempre recuerdo sus muchos conocimientos y su manera de enseñar.Fue un maestro excluido de enseñar en las escuelas por política .Que injusticia!!!!
Su hermano ,el sacristán, gran persona como toda su familia.
Íbamos con b ,por favor es un error de tu transcripción. Gracias por rectificar y perdona
Recuerdos muy lejanos..
Aún así, a pesar de los muchísimo años he observado que del "Pego" (el maestro) se acuerdan los que venían del campo a aprender a leer y escribir en su casa. La casa donde hoy vive el amigo Agustín, que deseo salga pronto de de ese encierro obligado que le tiene esta pandemia.
Están desapareciendo los últimos protagonista de aquellas décadas del 40/50, que den testimonio viviente de aquellos lejanos años, en Cilleros, cuando las calles estaban llenas de niños y niñas y la vida era larga.. muy larga y teníamos toda la vida por delante...
Publicar un comentario